NACIDO en un resplandor de gloria by David Wilkerson

NACIDO en un resplandor de gloria 

by David Wilkerson 

La iglesia del Nuevo Testamento nació en un resplandor de gloria. El Espíritu Santo descendió sobre ella con el fuego y los primeros cristianos hablaban en lenguas, y profetizaban. Han experimentado un gran convicción de pecado y multitudes fueron convertidos. El temor de Dios cayó sobre ellos y todos los que los vieron. Las prisiones no podían contenerlos y tormentas no podían ahogar. Realizó señales, prodigios y milagros. Evangelistas Temeraria iban por todas partes predicando la Palabra y que se incautaron sus pertenencias, ellos continuaron celebrando. Cuando fueron apedreados, ahorcado, quemado o crucificado, continuaron cantar y alabar a Dios. Era una iglesia triunfante, que ni temía a Satanás, irreverente a los ídolos, que no se iba a lograr por el desastre o la persecución. Era una iglesia lavados en la sangre, vivir y morir en la victoria. 

 

Lo verá como la iglesia de los últimos tiempos? ¿Cómo la iglesia demuestran en sus últimas horas? Como iglesia grasa próspero y egoísta, en el que habrá un puñado de verdaderos creyentes que sostienen a cabo mientras se ve la muerte y picar la apostasía lentamente como un cáncer? ¿El calor va a dejar pequeño, impotente y burla? ¿La iglesia dejará esta época con la hipocresía, con las manos sucias y corazones impuros, trayendo fuego extraño con un montón de reuniones de alabanza, de adoración y de oración? 

 

Habrá sin duda un gran apostasía. Habrá prostitución espiritual en todas partes. Y porque el pecado multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará. Liars se predicando falsa doctrina demoníaca. La gente tiene oídos que pican y vendrán en masa a escuchar la predicación aguado. El engaño es tan importante que incluso los elegidos será una dura prueba. 

 

Pero la iglesia de Jesucristo no va a gemir y cojera. Dejará victorioso, lleno de alegría indescriptible, en un río de la paz. Déjalo libre de todo vínculo con el pie en el cuello de Satanás. Y cada miembro de esta iglesia verdadera será vivir y morir sin miedo. El poder del tentador se romperá. Los cristianos son santos y derribar los ídolos. También serán fuertes en el Señor que los cristianos primitivos. 

 

"En los últimos días, dice Dios, derramaré de mi Espíritu sobre toda carne" (Hechos 2:17).